Durante la
época de verano y con la llegada del aumento de las temperaturas, muchas
personas manifiestan sentir las piernas más cansadas de lo normal, hinchadas o
inflamadas. A veces esa sensación se acompaña de síntomas como dolor,
pesadez,episodios de calambres e incluso hormigueos, sobre todo si se pasan muchas
horas en la misma posición, tanto de pie como sentados.
¿Por qué ocurre más en esta época del año?
La
inflamación en piernas de nuestro cuerpo se debe a un enlentecimiento de la
circulación de retorno o a un drenaje linfático insuficiente. Tanto una causa
como otra hacen que retengamos más líquido del normal y por tanto se produzca
la inflamación de las piernas y las partes distales de nuestro cuerpo. El calor
hace que las venas se dilaten, pierdan elasticidad y les cueste más bombear la
sangre. Si a esto le sumamos circunstancias que se dan en verano como usar
calzado distinto al de invierno (chanclas de la playa de mala calidad),
descuidos en una alimentación equilibrada que provoque más retención, pasar
mucho tiempo sentado descansando por las vacaciones o darle más actividad al
cuerpo de la que acostumbra en el resto del año, se pueden dar factores
causantes de un mayor sufrimiento de las piernas y los pies.
Equipo de presoterapia en Clínica Bretones Fernández
Ante estos
problemas circulatorios que se hacen más evidentes en verano, un tratamiento
de DRENAJE
LINFÁTICO MANUAL junto con nuestro complemento estrella de la PRESOTERAPIA, actuarán eliminando la
retención de líquido y mejorando la calidad de circulación de retorno y la
sensación de cansancio y síntomas que puedan aparecer.
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A
continuación os dejamos unos pequeños consejos para combatir la mala
circulación en verano.
1- LLEVA UNA DIETA EQUILIBRADA. Evitar
alimentos pesados que dificulten el flujo normal de sangre, junto con la
ingesta abundante de agua y la reducción de tóxicos como el tabaco, alcohol y
bebidas gaseosas y excitantes.
2- PRACTICA EJERCICIO TAMBIÉN DURANTE EL
VERANO. Hacerlo durante estos meses, evitando
hacerlo justo después de comer y realizarlo en las horas centrales del día
3- UTILIZA ROPA Y CALZADO CÓMODO. No
utilizar tejidos demasiado ajustados que compriman sobre todo los miembros
inferiores. Evita el calzado de mala calidad, exceso de tacones para estar
mucho tiempo de pie o abusar de chanclas de la playa demasiado planas y que nos
proporcionan poca sujeción.