Costalero... este es tu post para evitar lesiones.

Se acerca la semana grande para las hermandades, costaleros, músicos, penitentes y todos aquellos que disfrutan colaborando activamente en esta época de pasión.

Los costaleros pueden sufrir lesiones si no están preparados físicamente para aguantar largas horas de procesiones y ensayos. En este post hablaremos de las principales lesiones que pueden padecer los costaleros y en plantear una serie de consejos y pautas que puedan aplicar para evitarlas. 

Costalero en los ensayos de Almeria

Llevar un paso procesional 

supone un intenso esfuerzo 

para el cuerpo que puede 

provocar lesiones. Los

 principales factores de 

riesgo para padecerlas 

son: la carga que soportan 

(entre 25-50 kilos, teniendo 

un peso medio de 80); las 

horas de duración una procesión

 (una media de 4-5 horas); 

 las posturas forzadasy 

mantenidas durante todo 

el recorrido y el sedentarismo 

y la falta de preparación física 

de los costaleros.

Las zonas del cuerpo que más se afectan tras largas horas de ensayo y posterior procesión suelen ser:

- Columna cervical y lumbar: esguinces, latigazos, contracturas musculares y hernias discales

- Dolores articulares en tobillos, hombros, codos y rodillas

- Afectaciones del sistema nervioso: pinzamientos en la columna y adormecimientos en manos y pies principalmente




Ante estos síntomas y lesiones que pueden sufrir los costaleros os proponemos unos CONSEJOS Y RECOMENDACIONES básicas para esta temporada de preparación a la Semana Santa:

- Es aconsejable realizar de manera periódica algún deporte o ejercicio físico durante todo el año para mantenerse en forma y no llegar a los ensayos sin ninguna preparación física.

- Uso de calzado cómodo y ropa adecuada. El costal y la faja son instrumentos indispensables para el costalero. El costal tiene que colocarse de forma que quede apoyado sobre la última vértebra cervical para evitar mala distribución del peso, así como dolores en el cuello y hormigueo en los brazos.

- UNA PREPARACIÓN ADECUADA, DIRIGIDA POR UN FISIOTERAPEUTA, EVITA MUCHAS LESIONES. La figura del fisioterapeuta juega un papel muy importante y deberá estar presente antes, durante y después de la estación de penitencia. 

Mediante un tratamiento combinado de fisioterapia y osteopatía se realiza una labor con los costaleros para corregir lesiones previamente diagnosticadas, o prevenir que aparezcan a lo largo de la procesión, o en las semanas de ensayos con los pasos. Informando sobre cuáles son las posturas más adecuadas (cabeza erguida, mirada al frente, trabajo de musculatura abdominal y lumbar y trabajo de la respiración) planteando un programa de calentamiento y estiramientos para la época de ensayos y procesiones. 

En gran parte de Andalucía gracias a los colegios de fisioterapeutas,  esta figura está más presente que nunca en la Semana Santa para atender al costalero, y desde la Clínica Bretones Fernández hacemos un llamamiento a las Hermandades de Almería para apostar por la educación para la salud de sus costaleros,  incidiendo en que los ensayos no son preparación física suficiente para el esfuerzo de la estación de penitencia, y la importancia de la labor del fisioterapeuta para velar por una Semana Santa de calidad y sin incidencias.

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Beatriz Aguilera Luiz, fisioterapeuta ( Fisioterapia Clínica Bretones Fernández )

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